Es importante en nuestra sociedad actual que los propietarios de perros sepamos cómo actuar e intervenir en situaciones que se pueden dar de manera habitual en nuestro día a día con nuestro perro, ya sea dando un paseo, yendo a por el pan con nuestro amigo o pasando un rato en un pipican de la zona.

Además, debemos tener también presente que no todo el mundo en nuestra sociedad elije convivir con un perro, lo justo es que en los espacios comunes (la calle, parques, rutas ecológicas, etc) hagamos lo posible por respetar lo que, por derecho, es de todos, y no generar molestias.

Aquí os dejamos algunos consejos:

1. Podemos habituar a nuestro perro a no hacer sus necesidades en la acera, sobre ruedas de coches, paradas de autobús, soportales, etc. A menudo este tipo de acciones genera molestias a los vecinos. Si, además de llevar bolsitas para recoger los excrementos, llevamos con nosotros una botella con agua y jabón podremos limpiarlo en caso de “accidente”.

2. Busquemos ayuda si nuestro perro es reactivo ante estímulos como bicicletas, niños jugando o en patinete, otros perros, etc. Si nuestro perro reacciona ante alguno de estos estímulos ladrando o persiguiendo sin control nos está dando la alarma de que algo no va bien. Podría suponer un peligro potencial para los demás y para sí mismo. Además, este tipo de comportamientos puede generar inseguridad y desconfianza a quienes lo viven desde fuera.

3. Respetemos el espacio personal de perros y personas. Como responsables de nuestro perro tenemos que evitar que éste pueda ocasionar una situación incómoda a personas o perros. Si una persona o perro evita a nuestro compañero, respetemos su espacio personal, ¡seguro que hay otras muchas cosas interesantes que nuestro perro puede ir a conocer! Estemos también pendientes en todo momento del lenguaje de nuestro mejor amigo, si está incómodo o tenso ante una situación, persona o perro quizá necesite de nuestro apoyo y/o ayuda.

4. Enseñando a nuestro perro cosas aparentemente tan sencillas como estar tranquilo en la terraza de un bar o no tirar de la correa nos facilita estar más relajados a la hora de estar en espacios públicos y nos da seguridad ante cualquier situación, ya que nos facilitará anticiparnos ante cualquier cosa que pueda suceder y reaccionar a tiempo de manera correcta.